Michelle Nunn: «Soluciones poderosas que ayudan a las personas en Honduras a transformar sus vidas y comunidades»

Michelle Nunn: «Soluciones poderosas que ayudan a las personas en Honduras a transformar sus vidas y comunidades»

     

Por: Michelle  Nunn, CEO CARE

     

Acabo de regresar de un viaje para visitar a nuestro equipo de CARE Honduras, que sigue haciendo un trabajo increíble frente a una tasa de pobreza del 60 %. Los desafíos son particularmente graves para las mujeres: tienen menos posibilidades que los hombres de participar en trabajos remunerados, es menos probable que tengan una cuenta bancaria o sean propietarias de una casa, y enfrentan una de las tasas de feminicidio más altas del mundo. En algunas comunidades, la migración ha parecido ser el único camino viable hacia la oportunidad.

     

Pero lo principal que me llevé de mi viaje no fueron los desafíos, sino la resiliencia y la creatividad de los microempresarios y pequeños agricultores que conocí. A veces me preocupa que al ser testigos del sufrimiento podamos difundir más desesperanza que esperanza, así que, en ese espíritu, aquí comparto algunos puntos destacados:

     

Somos hermosas y somos fuertes. En asociación con Cargill, CARE está capacitando a más de 1,000 mujeres microempresarias y ayudándolas a crear grupos de ahorro para apoyarse mutuamente y acceder a capital adicional. CARE también está colaborando con el municipio de Siguatepeque, cuyo alcalde me compartió su compromiso de replicar este modelo para llegar a más de 5,000 microempresarias. El alcalde proporciona espacios privilegiados en el mercado que ayudan a estas empresarias a expandir sus bases de clientes y crean un ambiente comunitario vibrante.

 

Desde productoras de jugos de frutas hasta deliciosos chocolates de arándanos y colorida cerámica, las mujeres emprendedoras que conocí irradiaban orgullo y energía. Una de ellas me dijo que hace el pan más delicioso de Honduras. Ha pasado de llevar su pan dulce y semitas en una canasta, a una motocicleta, luego un automóvil, y ahora tiene un pequeño camión para entregar su pan a clientes en toda la área. Con el apoyo de CARE, estas emprendedoras ahora pueden constituirse legalmente, acceder a capital, vender en línea y a compradores al por mayor. Se han abierto mundos para ellas, sus familias y sus hijos.

 

Como dijo Julia Tróchez, quien vende ropa de bebé tejida, flores y juguetes: “Somos emprendedoras Y madres, y tenemos pequeños a quienes empujar hacia adelante en el mundo”. Y Gladys Haylock, quien es pintora, ceramista y jardinera, además de presidenta de la red de emprendimiento femenino, comentó: “No te puedes imaginar lo GRANDES que nos sentimos a través de este trabajo con CARE. Somos HERMOSAS y somos FUERTES.”

       

Una invitación a permanecer en el país. Elías es un pequeño agricultor de tilapia que ha construido su negocio con mucho esfuerzo y creó la Asociación de Acuicultura El Achiotal junto con otros agricultores de su comunidad para mejorar su capacidad de acción. Elías me dijo que Honduras podría ser el exportador número 1 de tilapia a Estados Unidos con solo un poco más de inversión en pequeños productores como él.

   

CARE ha introducido el modelo de grupos de ahorro a estos agricultores y les ha brindado asistencia técnica, como aireadores que están aumentando significativamente los rendimientos. Cuando el cambio climático y el aumento del calor provocaron la pérdida del 90 % de la tilapia en la granja de Elías, él adoptó rápidamente una innovación presentada por CARE: vacunas para peces. A pesar de cierto escepticismo inicial, la asociación de acuicultores/as y CARE pilotaron este trabajo y, con el tiempo, juntos lograron reducir la pérdida de tilapia a casi cero.

   

Una lideresa del grupo compartió que, trabajando juntos, empleando las mejores tecnologías y accediendo a capital, pasó de producir 12,000 libras de pescado al año, a producir 72,000 libras. Con gran esperanza, me dijo: “Queremos que nuestros hijos tengan esta herencia: esta invitación a quedarse en su propia comunidad y país, pero con oportunidades.”

         

La capacidad de soñar. A veces, las innovaciones simples pueden ser revolucionarias. Una tarde con María Barahona, Nelo Porras y sus hijas Alexa y Nohelia fue una ventana fascinante a lo que un biodigestor puede hacer para cambiar la calidad de vida de una familia y una comunidad. María y Nelo nos mostraron los cambios milagrosos que esta sencilla tecnología ha traído a sus vidas: combinaron el estiércol de sus cerdos y agua en el biodigestor y luego nos demostraron cómo produce galones de fertilizante rico que nutre su jardín, gas para cocinar en el hogar, reduce la inhalación de humo peligroso para la familia y le ahorra a María 8 HORAS de recolección de leña.

   

Se estima que el biodigestor dura más de 20 años y recupera su valor dentro del primer año. Además, cada biodigestor instalado captura más de 10,000 toneladas de metano al año, puede alimentar cocinas y luces durante más de ocho horas, y elimina por completo el olor de los cerdos. El equipo de CARE Honduras busca asociar esta poderosa solución con miles de agricultores más en Honduras, y con un poco de capital filantrópico inicial, las familias pueden permitirse comprar esta tecnología directamente. Como nos dijeron María y Nelo, el biodigestor les ha brindado muchos regalos, uno de ellos es la capacidad de soñar con cuánto más pueden lograr para su familia y comunidad.